Benjaz, un apasionado del futbol, se emocionó al enterarse de que el Mundial estaba por comenzar. En cada “cascarita”, él quería ser como su ídolo, el “Frijolito” Herrera.

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Un día, Benjaz recibió un regalo muy peculiar: un álbum para completar con las estampas de todos los jugadores de las selecciones participantes. Sin embargo, la tarea resultó más complicada de lo que esperaba.

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¿Crees que Benjaz logró su misión? ¡Lee su historia para descubrirlo!